En la primavera de 2007 tuve la fortuna de asistir como espectador a la representación del magno músical/ópera/opereta de Leonard Bersntein, Candide, un espectáculo para frotarse las ojos, de una soberbia escenografía y unas canciones estupendas.
Sirva de muestra la obertura de la obra, dirigida por el propio Bernstein en 1988, dirigiendo a la London Symphony Orchestra , y una divertida versión del Glitter and be gay, con una sensacional y bellísima Kristin Chenoweth...
3 comentarios:
Candide, esa gran ópera. Todo el mundo debería conocerla. Bernsteinno sólo compuso West side Story. Aqúi una prueba.
A mí me apasiona Bernstein, no sólo como músico sino también como director. Me encanta verle dirigir. Tengo grabado un concierto de Año Nuevo dirigido por él que considero una auténtica joya.
Qué afortunado fuiste al asistir a esa representación... Qué maravilla.
Una maravilla, Clementine; ese Teatro de la Ópera de Praga, esa escenografía, esas voces, esa partitura...
Y es verdad, que chispa y fuerza tiene el gran Bernstein dirigiendo!, es una delicia verlo.
Y si, haber vivido eso fue un privilegio, algo que recordaré siempre...
Un abrazo, amiga.
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